Contribución Publicada en Revista Impacta - Enero 2010.____________________________________
En más de alguna ocasión usted habrá escuchado el termino de Responsabilidad Empresarial Social (RSE), ya sea en un anuncio, un artículo de prensa, en investigaciones académicas de la gestión de los negocios, o en su misma empresa.
Tal vez usted posee interés en conocer un poco más sobre el término de Responsabilidad Social Empresarial, y desea que su empresa adopte esta nueva forma de hacer negocios. O si su empresa ya comenzó, usted desea participar y apoyar en el fortalecimiento de la responsabilidad social en su organización.
Independientemente de qué ha escuchado uno sobre la RSE en los diversos medios, es clave aprender bien desde el principio el concepto adecuado de la RSE. Esto es debido a que el término es utilizado erradamente para hacer alusión exclusiva a donaciones o acciones de caridad de las empresas, y no al concepto integral y de avanzada que se plantea por muchas organizaciones a nivel mundial. Otra distorsión del concepto es cuando se utiliza principalmente como una herramienta de marketing que no responde a la realidad de la conducta empresarial.
Por ello, primero es importante conocer con mayor profundidad de qué trata la RSE. En el caso de El Salvador, conocer y comprender la definición de responsabilidad social empresarial que maneja Fundemas, la organización líder en la promoción de la RSE en el país. Fundemas considera que la RSE es un imperativo estratégico que fomenta en las empresas la incorporación de políticas y prácticas que contribuyen a relaciones con los accionistas, los empleados, la comunidad y el medio ambiente, a través de un nuevo marco de principios y valores éticos.
Sin embargo, la RSE concebida como un imperativo estratégico supone la gestión responsable de los negocios de manera que se reducen los impactos y se aumentan los beneficios. Esto implica aspectos laborales, ambientales, comerciales, etc. además de los comunitarios. Mucha de esa gestión no es con fines publicitarios.
Una manera de describir la RSE es por medio del concepto de la triple hoja de balance (triple bottom line) en la que la empresa no solo se enfoca en el balance económico de su gestión, sino también en el balance ambiental y social. Esta visión integra a los diferentes sectores de la sociedad: gobiernos, sociedad civil y empresas.
Igualmente, es una necesidad conocer las 7 áreas que Fundemas y sus organizaciones pares en Centroamérica han definido. De esta manera se comprende mejor como se implementa en cada organización esta nueva forma de hacer negocios.
Las áreas de la RSE son:
Gobernabilidad. Se refiere a la manera en que una empresa es administrada y como esta logra sus metas, tomando en cuenta, además, a los grupos de interés relacionados con la organización tales como los socios o propietarios, los empleados, ejecutivos, los clientes y proveedores, los gremios, entre otros. Esta área es la que incluye la ejecución de un programa de ética y cumplimiento que implica poseer un código de ética y un sistema de educación, retroalimentación y denuncias.
Publico Interno. Son todas y cada una de las personas que integran la empresa, partiendo por los trabajadores, en todo nivel y área de la empresa, los dueños, comités de trabajo, entre otros. Las practicas de las empresas comprometidas con la RSE incluyen programas de desarrollo profesional, prestaciones y beneficios adicionales a lo establecido por la ley que van encaminados a mejorar la calidad de vida de los trabajadores.
Mercadeo Responsable. Es el conjunto de métodos, acciones y prácticas que considera la actividad de mercadeo, incluyendo comercialización y publicidad, según la visión ética que imprime la RSE. Estas acciones van desde la elaboración del producto, su seguridad, su rotulación, etiquetado y promoción, hasta vincular el mercadeo con una causa social o bien como las estrategias de mercadeo responsable contribuyen, fortalecen y/o posicionan la industria de la empresa, esto a través de buenas prácticas de RSE
Medio Ambiente. La gestión empresarial ambiental incluye la identificación de los impactos que causa su actividad productiva, la puesta en marcha de políticas internas para el beneficio del medio ambiente.
Comunidad. Esta área permite que la empresa se relacione e involucre en los problemas de la comunidad que le rodea participando de forma activa. La empresa, como un vecino corporativo, es parte de la comunidad, y por ello los problemas de ella le atañen. Es así como, de manera estratégica y metódica, no como caridad ni filantropía esporádica, que la empresa colabora con programas que fortalecen el desarrollo de la comunidad.
Proveedores. Los proveedores de servicios o productos se convierten en la extensión de una empresa. En muchos casos, también representan eslabones importantes en la cadena de suministro. Es importante que las empresas limpien su cadena de suministro fomentando la adopción de prácticas de RSE entre sus proveedores.
Política Pública. Una empresa no puede aislarse de su entorno y concentrarse únicamente en aspectos directamente con su actividad productiva. Es así como las empresas se deben involucrar en la creación de políticas que promuevan el desarrollo social y económico del país.
Existe documentación publicada por Fundemas que le puede instruir, conocer casos informarse sobre talleres o seminarios. Para ello, puede contactar directamente a la fundación o visitar su sitio web www.fundemas.org. Existen guías básicas sobre como implementar la RSE en sus diferentes áreas, como establecer un código de ética y hasta como realizar un reporte de sostenibilidad.
Evalúe su área y encuentre oportunidades de aplicar la RSE.
Otra herramienta útil es la de auto-diagnostico conocida como los Indicadores de RSE. Con esta herramienta puede llenar un checklist para evaluar cómo se encuentra su empresa con relación a los principios básicos de la RSE y conocer sus áreas de mejora.
Si lo desea, también puede solicitar por medio de Fundemas casos de éxito de RSE en las áreas ya mencionadas para conocer mejores prácticas que su empresa puede adaptar y/o mejorar.
Además, organizaciones como el BID, Banco Mundial, Forética y otros poseen en sus sitios material descargable de investigaciones o libros con contenido relevante que puede interesarle. Por ejemplo, el BID publicó hace un par de años el libro El Caso Empresarial de la RSE que documenta como las empresas se benefician de la gestión responsable. Material como este le brindará argumentos para presentar las ventajas de que su organización abrace esta nueva gestión empresarial.
Mientras más conozca sobre la RSE, mejor puede comprender como aplicarla en su empresa. Si usted no está en el nivel de toma de decisión, pero puede influir al respecto, puede tomar los siguientes pasos:
Evalúe su área de trabajo y analice la oportunidad de aplicación de prácticas responsables. Es importante comenzar con acciones sencillas, de baja inversión económica y medibles.
Discuta con su superior su intención de realizar acciones de RSE en su departamento. Difícilmente le cerraran las puertas si se plantea cuales son los beneficios para la empresa.
Mida el impacto de la mejor manera posible. El aspecto medioambiental es uno de los que podría considerarse más fáciles de medir. Por ejemplo, si la acción es ahorro de papel, se puede medir el ahorro en dinero y lo que representa en arboles que no se han talado. Por muy pequeña que parezca la acción, si se establece con entusiasmo y se liga con otras actividades, el impacto puede traducirse también en una mayor conciencia ambiental del personal involucrado.
Si no tiene éxito, no se desanime, siga intentando. Busque una aproximación diferente que puede interesarle a sus superiores.
Es cierto, es mucho más fácil cuando el compromiso social empresarial nace de la alta dirección, pero al representar beneficios para las empresas e irse convirtiendo cada día en un imperativo de negocios, la RSE es una manera de hacer negocios que poco a poco no será una opción.
______________________________________________________
Autora: Claudia E. Cruz. Gerente de Comunicaciones Corporativas, Cenérgica-Nejapa Power. Licenciada en Comunicaciones (University of the Ozarks, USA), Máster en Responsabilidad Social Corporativa (Universidad de Barcelona). Claudia se desempeña como Chairwoman del Comité de RSE de AmCham El Salvador y miembro de la junta directiva de Glasswing International.
